miércoles, 7 de septiembre de 2011


Preámbulo de Al-Anon
Sugerido para los Doce Pasos
Los Grupos de Familia Al-Anon son una hermandad de parientes y amigos de alcohólicos que comparten sus experiencias, fortaleza y esperanza, con el fin de encontrarle solución a su problema común. Creemos que el alcoholismo es una enfermedad de la familia, y que un cambio de actitud puede ayudar a la recuperación.
Al-Anon no está aliado con ninguna secta ni religión, entidad política, organización ni institución; no toma parte en controversias; no apoya ni combate ninguna causa. No existe cuota alguna para hacerse miembro. Al-Anon se mantiene a sí mismo por medio de las contribuciones voluntarias de sus miembros.
En Al-Anon perseguimos un único propósito: ayudar a los familiares y amigos de los alcohólicos. Hacemos esto practicando los Doce Pasos dando la bienvenida y ofreciendo consuelo a los familiares de los alcohólicos y comprendiendo y animando al alcohólico.
Reprinted with permission of Al-Anon Family Group Headquarters, Inc.

¿Es Alateen para tí?
  •  ¿Tienes un padre, amigo íntimo o un familiar que tenga problemas con la bebida?
  • ¿Sientes que la vida te ha jugado una mala pasada? 
  • ¿Sientes odio hacia uno de tus padres o hacia ambos?
  • ¿Has perdido el respeto por tu padre o madre que no es alcohólico o alcohólica?
  • ¿Tratas de vengarte cuando crees que tus padres han sido injustos?
  • ¿Estás avergonzado de tu hogar?
  • ¿Comparas tu hogar con el de tus amigos?
  • ¿Pierdes los estribos a menudo?
  • ¿A menudo haces o dices cosas que no quieres pero que no puedes evitar?
  • ¿Tienes problemas para concentrarte en los estudios?
  • ¿Sientes enojo al tener que hacer tareas domésticas que a tu juicio corresponden a tus padres?
  • ¿Alguna vez abrigaste el deseo de estar muerto?
  • ¿Estás pensando que la forma de olvidar tus problemas está en la bebida o en las drogas?
  • ¿Encuentras difícil dialogar con tus padres? ¿Hablas con ellos?
  • ¿Acudes a los extremos para agradar a las personas?
  • ¿Temes al futuro?
  • ¿Piensas que nadie puede comprender cómo te sientes?
  • ¿Piensas que impulsas al alcohólico a beber?
  • ¿Te angustias cuando tus padres discuten?
  • ¿Pasas mucho tiempo fuera de tu hogar porque no te agrada el ambiente?
  • ¿Evitas decirle la verdad a tus padres?
  • ¿Te preocupas por tus padres?
  • ¿Estas nervioso o temeroso gran parte del tiempo?
  • ¿Te indignas por la manera de beber compulsiva del alcohólico?
  • ¿Sientes que nadie te quiere de verdad o que a nadie le importa lo que te pase?
  • ¿Sientes que eres una carga para tus padres?
  • ¿Actúas de manera caprichosa para atraer la atención?
  • ¿Escondes tus verdaderos sentimientos fingiendo que no te importa?
  • ¿Te aprovechas de tus padres cuando tienes la posibilidad de hacerlo?
Si has contestado que "sí" a cualquiera de estas preguntas y estás en estrecho contacto con un enfermo alcohólico, Alateen te puede ayudar.

Literatura Alateen

En este libro encontrará la historia de Alateen,  que forma parte de los Grupos de Familia Al-Anon, que es a su vez la hermandad de personas cuyas vidas están siendo afectadas por el contacto directo con un bebedor con problemas. El mismo nos habla de los temores, los problemas, las esperanzas y los logros de estas personas.
                              

Las páginas siguientes abrazan día por día las experiencias personales de miembros Alateen de todas partes del mundo. Algunas de éstas son únicas, y muchas de esas experiencias las conocemos bien. Todas captan el esfuerzo de nuestra vida con el problema del alcoholismo, la fortaleza que hemos hallado en el programa y la esperanza que sentimos al compartir con otras personas que nos comprenden.

El mensaje de esta colección de pensamientos es sencillo: "El ayer ya pasó, el mañana aún no ha llegado, de modo que sólo puedo vivir el día de hoy". Si dispusieramos de tiempo para pensar en esto, ya no nos quedaría tiempo para lamentarnos por el pasado ni de preocuparnos por el futuro. Estaremos demasiado ocupados sacándole provecho a la vida, un día a la vez.

Acerca de Alateen
Los miembros de Alateen se reúnen para ayudarse mutuamente con sus problemas comunes. Comparten sus experiencias, aprenden sobre la enfermedad familiar del alcoholismo y se concentran en su crecimiento y progreso para contrarrestar los efectos dañinos que el alcoholismo ha causado en sus vidas. 
 Logran esto practicando los Doce Pasos de Alcohólicos Anónimos. Experimentan el bienestar que se desprende de saber que no están solos y que hay personas que se preocupan por ellos. Recuperan su autoestima y vuelven a tener esperanzas en el futuro. A medida que aprenden a enfrentarse a sus problemas y a resolverlos, se dan cuenta de que pueden vivir una vida llena de satisfacciones, amor y alegría.

¿Qué es Alateen?
  •  Alateen es parte de los Grupos de Familia Al-Anon, no es una confraternidad separada, estos Grupos gozan de los mismos derechos, privilegios y responsabilidades que poseen todos los Grupos Al-Anon.
  •  Los miembros de Alateen son Adolescentes (12 a 20 años), cuyas vidas han sido afectadas por el beber compulsivo de un pariente o amigo. Los miembros de Alateen se reúnen para compartir experiencias, fortaleza y esperanza; su único propósito es prestar ayuda a los adolescentes familiares de alcohólicos, dandoles la bienvenida y brindandoles alivio.

¿Cómo saber si necesito ayuda?
A millones de personas les afecta el exceso en la bebida de alguna persona allegada.
Las veinte preguntas siguientes están destinadas a ayudarle a usted a decidir si necesita o no de Al-Anon.
  1. ¿Se preocupa de cuánto bebe otra persona?
  2. ¿Tiene problemas económicos a causa del beber de otra persona?
  3. ¿Miente para encubrir que otra persona bebe?
  4. ¿Cree que si el bebedor le amara dejaría de beber para complacerle?
  5. ¿Cree que el comportamiento del bebedor lo causan sus compañeros?
  6. ¿Se alteran con frecuencia sus planes o se aplazan las horas de la comida a causa del bebedor?
  7. ¿Hace amenazas tales como, "Si no dejas de beber, te abandonaré"?
  8. ¿Trata discretamente de oler el aliento del bebedor?
  9. ¿Teme disgustar a alguien por miedo a incitarle a que se emborrache?
  10. ¿Se ha sentido ofendido o avergonzado por el comportamiento de un bebedor?
  11. ¿Le parece que todas las fiestas se estropean a causa del exceso de bebida?
  12. ¿Ha pensado en llamar a la policía para pedir ayuda por miedo al maltrato?
  13. ¿Busca el licor escondido?
  14. ¿Viaja a menudo en automóvil con un conductor que ha estado bebiendo?
  15. ¿Ha rechazado invitaciones sociales por temor o ansiedad?
  16. ¿Se siente a veces fracasado cuando piensa en todo lo que ha hecho por controlar al bebedor?
  17. ¿Cree que si el bebedor dejara de beber, los otros problemas se resolverían?
  18. ¿Amenaza alguna vez con herirse para asustar al bebedor?
  19. ¿Se siente enojado, confuso y deprimido la mayor parte del tiempo?
  20. ¿Cree que no hay nadie que comprenda sus problemas?

Cómo afecta el alcoholismo?
El alcoholismo es una enfermedad de la familia. El hecho de beber compulsivamente afecta al alcohólico y al mundo que lo rodea: amistades, empleo, hijos, padres, novia, matrimonio... todos sufren los efectos del alcoholismo. Los que quedan más profundamente afectados son los que están más en contacto directo con el alcohólico y los que se preocupan más por él quedan literalmente embrollados por el comportamiento de éste. Reaccionan ante el comportamiento del alcohólico.
Tratan de controlar la bebida de éste, pero ven que hacerlo está fuera de su alcance. Se avergüenzan de las escenas que el alcohólico hace en público, pero en privado esta vergüenza se convierte en acusación. No tardarán en sentirse culpables, conllevando las heridas, temores y culpa del alcohólico.
Aún con buenas intenciones, comienzan a contar el número de tragos del alcohólico. Vacían licores costosos en el fregadero, registran la casa buscando botellas escondidas, oyen hasta el sonido del sacacorchos. Todo su pensamiento se concentra en lo que hace el alcohólico, en lo que no hace, y en lo que podría hacerse para que deje de beber.
... Esta es su obsesión.
Es muy doloroso contemplar de qué forma un ser humano se va matando lentamente con el alcohol. Y aunque el alcohólico no parece preocuparse por las cuentas que hay que pagar, su empleo, los hijos y su propia salud, la gente que lo rodea sí empieza a preocuparse. Cometen el error de encubrirlo. Y le arreglan todo: lo excusan, mienten, tratando de enmendar relaciones que se habían echado a perder, y su preocupación va en aumento.
...Esta es su angustia.
Tarde o temprano, el comportamiento del alcohólico hace que otros se enojen. Se dan cuenta de que el alcohólico descuida sus responsabilidades, que les está mintiendo y que está aprovechándose de ellos. Han empezado a imaginarse que el alcohílico no los quiere y desean tomar revancha castigándolo para que sufra las heridas y frustraciones causadas por su beber incontrolable.
...Esta es su ira.
Los más allegados al alcohólico empiezan a fingir. Aceptan promesas, creen que el problema ha desaparecido cada vez que hay un periodo de sobriedad. Y aunque el sentido común les dice que hay algo que no anda bien respecto a la bebida y comportamiento del alcohólico, aún siguen ocultando sus sentimientos y pensamientos.
...Esta es su negación.
Quizá el peor daño que sufren los que han vivido con un alcohólico es el pensamiento persistente y tenaz de que la culpa es de ellos: no han estado a la altura de las circunstancias, no son lo suficientemente atractivos, no poseen la inteligencia suficiente para haber resuelto el problema de su ser querido. Y lo atribuyen a algo que hicieron o dejaron de hacer.
...Esto es su sentimiento de culpabilidad.
Los que hemos acudido a Al-Anon estábamos desesperados, éramos incapaces de pensar en una posibilidad de cambio, incapaces de seguir adelante. Nos sentíamos defraudados por nuestro ser querido, abrumados de responsabilidades, sentíamos que a nadie le hacíamos falta, que nadie nos quería, que estábamos solos. Aunque están también los arrogantes, presumidos, santurrones y dominantes; pero todos venimos porque lo deseamos, porque necesitamos ayuda.

No importa qué nos ha impulsado a acudir a Al-Anon: el comportamiento de un amigo alcohólico, de un hijo, hermano o hermana, o un pariente alcohólico, pronto nos damos cuenta que tenemos que cambiar nuestra forma de pensar antes de poder abordar con éxito un nuevo método para resolver el problema de la vida. En Al-Anonaprendemos a enfrentarnos a nuestra obsesión, nuestra angustia, nuestra ira, nuestra negación y nuestro sentimiento de culpabilidad. Por medio de la hermandad aligeramos nuestras cargas emocionales, al compartir nuestra experiencia, fortaleza y esperanza con los demás. Poco a poco, en nuestras sesiones podemos darnos cuenta de que muchas de nuestras molestias provienen de nuestra actitud. Tratamos de cambiar de actitud, de aprender a tener responsabilidad hacia nosotros mismos, y de descubrir sentimientos de autoestima, amor y crecimiento espiritual. Dejamos de insistir en el alcohólico y lo hacemos en lo que sí tenemos potestad: en nuestra propia vida.

¿Qué es el Alcoholismo?

La Asociación Médica Americana ha catalogado el alcoholismo como una enfermedad que puede ser controlada pero no curada. Uno de los síntomas es un incontrolable deseo de beber. El alcoholismo es una enfermedad progresiva y mientras el alcohólico siga bebiendo, su impulso de beber seguirá en aumento. Si la enfermedad no es controlada puede terminar en la locura o la muerte. La única manera de contrarrestar el alcoholismo es una abstinencia total.
El alcoholismo es una enfermedad para toda la vida. Autoridades en la materia coinciden en que el alcohólico, aun con varios años de sobriedad, no puede controlar sus tragos cuando comienza a beber nuevamente.
Hoy en día hay muchos tratamientos exitosos para el alcoholismo. Alcohólicos Anónimos es el más difundido y considerado mundialmente el más eficaz. El alcoholismo ya no es una condición sin esperanza, siempre y cuando sea reconocido y tratado.
Personas de diferentes clases son alcohólicas... Sólo de un tres al cinco por ciento de los enfermos alcohólicos son vagabundos, el resto conservan a su familia y empleos y se manejan más o menos bien, aunque su forma de beber puede afectar en parte a su vida familiar, social, trabajo o bien a estas tres cosas. Un enfermo alcohólico es aquél que tiene problemas en cualquier aspecto de su vida a causa de la bebida.
El alcohólico bebe porque piensa que tiene que hacerlo, utiliza el alcohol como una muleta o un escape. Está dolorido emocionalmente y recurre al alcohol para acabar ese dolor; pero a la larga depende tanto del alcohol que está convencido que no puede vivir sin él. Esto se llama obsesión.
Algunos alcohólicos cuando tratan de dejar de beber sufren síntomas tan angustiantes que recurren nuevamente a la bebida porque sienten que es la única manera de aplacar la agonía. Esto puede llamarse "dependencia del alcohol".
A muchos de los alcohólicos les gustaría ser bebedores sociales. Emplean mucho de su tiempo y esfuerzo tratando de controlarse para poder beber como otras personas. Beben los fines de semana o se limitan a beber cierta clase de bebidas, pero nunca pueden estar seguros de poder detenerse cuando lo deseen. Terminan por emborracharse, aun cuando se habían propuesto no hacerlo. Esto se llama compulsión.
El alcoholismo es un tipo de enfermedad en la que el paciente no cree estar enfermo. La esperanza de recuperación estriba en su capacidad de reconocer su necesidad de ayuda, su deseo de dejar de beber y su disponibilidad en admitir que, por sí mismo, no puede lidiar con el problema.

12 Conceptos de Servicio
Los Doce Pasos y Tradiciones son las guías para el progreso personal y la unidad del grupo. Los Doce Conceptos son la guía para el servicio, demuestran cómo puede hacerse la labor del Duodécimo Paso a gran escala y cómo los miembros de la Oficina de Servicio Mundial pueden relacionarse entre sí y con los grupos, a través de la Conferencia de Servicio Mundial, para divulgar el mensaje de Al-Anon por todo el mundo.
(Tomado del libro Valor para cambiar – Un día a la vez en Al-Anon II SB-16).
  1. La responsabilidad y autoridad fundamental de los servicios mundiales de Al-Anon corresponde a los grupos de Al-Anon.
  2. Los Grupos de Familia Al-Anon han delegado por entero la autoridad administrativa y de funcionamiento a su Conferencia y sus ramas de servicio.
  3. El Derecho de Decisión hace posible el liderazgo eficaz.
  4. La participación es la clave de la armonía.
  5. Los Derechos de Apelación y Petición protegen a las minorías y aseguran que éstas serán escuchadas.
  6. La Conferencia reconoce la responsabilidad administrativa primordial de los administradores (custodios).
  7. Los administradores (custodios) tienen derecho legales, mientras que los derechos de la Conferencia son tradicionales.
  8. La Junta de Administradores (custodios) delega total autoridad a sus comités ejecutivos para la administración de rutina de la Sede de Al-Anon.
  9. Un buen liderazgo personal es una necesidad a todos los niveles de servicio. En el campo del servicio mundial, la Junta de Administradores (custodios) asume la dirección principal.
  10. La responsabilidad de servicio está equilibrada por una autoridad de servicio definida cuidadosamente para evitar la doble dirección de administración.
  11. La Oficina de Servicio Mundial está compuesta de comités selectos, ejecutivos y miembros del personal.
  12. Las Garantías Generales de la Conferencia contienen la base espiritual del servicio mundial de Al-Anon, Artículo 12 de la Carta.

12 Tradiciones de Al-Anon
Las Tradiciones que citamos a continuación hacen que permanezcamos ligados en unidad. Guían a los grupos en sus relaciones con otros grupos, con AA y con el mundo circundante. Recomiendan actitudes de grupo sobre dirección, reclutamiento de miembros, dinero, propiedad, relaciones públicas y anonimato.

Las Tradiciones surgieron a partir de las experiencias de grupos AA al tratar de resolver el problema de vivir y trabajar juntos. Al-Anon adoptó estos principios de grupo, y al transcurir los años los miembros de esta hermandad se dieron cuenta de la validez y sabiduría de dichos principios. Aunque son sólo sugerencias, la unidad de Al-Anon y quizá incluso su supervivencia dependen de la fidelidad a estos principios.
  1. Nuestro bienestar común debiera tener la preferencia; el progreso individual del mayor número depende de la unión.
  2. Existe sólo una autoridad fundamental para regir los propósitos del grupo: un Dios bondadoso que se manifiesta en la conciencia de cada grupo. Nuestros dirigentes son tan sólo fieles servidores, y no gobiernan.
  3. Cuando los familiares de los alcohólicos se reúnen para prestarse mutua ayuda, pueden llamarse un Grupo de Familia Al-Anon, siempre que, como grupo, no tenga otra afiliación. El único requisito para ser miembro es tener un pariente o amigo con un problema de alcoholismo.
  4. Cada grupo debiera ser autónomo, excepto en asuntos que afecten a otros grupos o a Al-Anon, o AA en su totalidad.
  5. Cada Grupo de Familia Al-Anon persigue un solo propósito: prestar ayuda a los familiares de los alcohólicos. Logramos esto, practicando los Doce Pasos de AA nosotros mismos, comprendiendo y estimulando a nuestros propios familiares aquejados por el alcoholismo, y dando la bienvenida y brindando alivio a los familiares de los alcohólicos.
  6. Nuestros grupos, como tales, jamás debieran apoyar, financiar, ni prestar su nombre a ninguna empresa extraña, para evitar que problemas de dinero, propiedad o prestigio nos desvíen de nuestro objetivo espiritual que es el primordial. Aun siendo una entidad separada, deberíamos cooperar siempre con Alcohólicos Anónimos.
  7. Cada grupo ha de ser económicamente autosuficiente y, por lo tanto, debe rehusar contribuciones externas.
  8. Las actividades prescritas por el Duodécimo Paso en Al-Anon nunca debieran tener carácter profesional, pero nuestros centros de servicio pueden contratar empleados especializados.
  9. Nuestros grupos, como tales, nunca debieran organizarse, pero pueden crear centros de servicios o comisiones directamente responsables ante las personas a quienes sirven.
  10. Los Grupos de Familia Al-Anon no deben emitir opiniones acerca de asuntos ajenos a sus actividades. Por consiguiente, su nombre nunca debe mezclarse en polémicas públicas.
  11. Nuestra política de relaciones públicas se basa más bien en la atracción que en la promoción. Necesitamos mantener siempre el anonimato personal en la prensa, radio, el cine y la televisión. Debemos proteger con gran esmero el anonimato de todos los miembros de AA.
  12. El anonimato es la base espiritual de nuestras Tradiciones y siempre nos recuerda que debemos anteponer los principios a las personas.

12 Pasos de Al-Anon
Por su poder y valor reconocidos, los Doce Pasos de AA fueron adoptados por Al-Anon, casi palabra por palabra. Representan una forma de vida que atrae a toda clase de personas de buena voluntad, de cualquier creencia religiosa o sin ninguna. ¡Observen el poder de cada palabra! (Tomado del libro Valor para cambiar – Un día a la vez en Al-Anon II SB-16).
  1. Admitimos que éramos incapaces de afrontar solos el alcohol, y que nuestra vida se había vuelto ingobernable.
  2. Llegamos a creer que un Poder Superior podría devolvernos el sano juicio.
  3. Resolvimos confiar nuestra voluntad y nuestra vida al cuidado de Dios, según nuestro propio entendimiento de ÉL.
  4. Sin temor, hicimos un sincero y minucioso examen de conciencia.
  5. Admitimos ante Dios, ante nosotros mismos y ante otro ser humano, la naturaleza exacta de nuestras faltas.
  6. Estuvimos enteramente dispuestos a que Dios eliminase todos estos defectos de carácter.
  7. Humildemente pedimos a Dios que nos librase de nuestras culpas.
  8. Hicimos una lista de todas las personas a quienes habíamos perjudicado, y estuvimos dispuestos a reperar el mal que les ocasionamos.
  9. Reparamos directamente el mal causado a estas personas cuando nos fue posible, excepto en los casos en que el hacerlo les hubiese infligido más daño, o perjudicado a un tercero.
  10. Proseguimos con nuestro examen de conciencia, admitiendo espontáneamente nuestras faltas al momento de reconocerlas.
  11. Mediante la oración y la meditación, tratamos de mejorar nuestro contacto consciente con Dios, según nuestro propio entendimiento de Él, y le pedimos tan sólo la capacidad para reconocer su voluntad y las fuerzas para cumplirla.
  12. Habiendo logrado un despertar espiritual como resultado de estos pasos, tratamos de llevar este mensaje a otras personas, y practicar estos principios en todas nuestras acciones.